Se trata de un sujeto que hacía llamadas al 911 para reportar sus propios asesinatos. Y además lo hacía llorando. Es la historia de Paul Michael Stephani. 31 de diciembre de 1980, Minnesota, Estados Unidos, una llamada al 911 alerta a la policía de una agresión “ Por favor, mande a un equipo a Pierce Butler Road Malmberg… a Malmberg Manufacturing Company Machine shop…en un taller, por favor, mande una ambulancia también, hay una chica herida aquí. ” La policía llegó a la zona y encontró a una mujer apuñalada pero que aún se encontraba con vida, del agresor nada se supo, pero se creía que se trataba de la persona que había realizado la llamada. El 3 de junio de 1981, otro reporte similar fue recibido en el 911. Cuando la policía llegó la zona encontró una mujer sin vida, de 18 años, también apuñalada. En julio de 1982, otra víctima, y el mismo modo de operar....